Rinitis alérgica… Lo sabemos; sabemos esa sensación incómoda de no poder respirar. Sientes que en tus fosas nasales está atascado un pez globo que además genera una horrible sensación de goteo.
Si sabes de lo que te hablamos y/o alguna vez te has preguntado si sufres de rinitis alérgica… ¿quisieras saber cómo ponerle fin a esta molesta afección? Sigue leyendo este artículo para poder conocer todo acerca de ella y cómo combatirla.
Contenidos
Algo anda mal…
La rinitis alérgica se produce debido a una respuesta exagerada de tu sistema inmunológico. Debido a agentes externos que cree que pueden afectarlo e incluso dañarlo.
La explicación científica va marcada por un exceso de producción de sustancias químicas lideradas por la histamina. Ésta es la encargada de emitir un mensaje a los vasos sanguíneos para que se dirijan al tejido más cercano. Por tanto, se ocasionan hinchazones en áreas como fosas nasales, garganta, lengua, rostro, y otras partes del cuerpo.
Factores alérgenos que causan la rinitis alérgica
Entre los alérgenos más habituales que pueden provocar rinitis alérgica encontramos el polvo doméstico que contiene 2 de los tipos de ácaros más conocidos. Dermatophagoides Farinae y Dermatophagoides Pteronyssinus. Estos viven en los hogares durante todo el año. Los lugares donde más se alojan son colchones, almohadas, alfombras, juguetes de felpa y cortinas.
Sin embargo, la humedad y temperatura cálida favorece su proliferación. Por lo que debido a que en otoño e invierno mantenemos nuestros hogares cerrados con el uso de calefacción artificial suelen ser las temporadas en que mayormente afectan.
Cuidado con lo que respiras
También, el hongo de la humedad, conocido comúnmente como moho, pero cuyo nombre científico es cladosporium herbarum. Ésta alérgeno externo produce rinitis alérgica y podemos encontrarlo en áreas externas como maderas, poco secas y con escasa circulación de aire. Las estaciones húmedas también son ideales para que se reproduzcan.
Nuestras amigas las abejas…
Tenemos, en otro lugar el polen que es el alérgeno más común que causa rinitis alérgica que se da en distintas épocas durante el año. Depende de la zona terreste y el tipo de vegetación existente.
Por ejemplo, algunos árboles como el abedul y el platano de sombra polinizan durante marzo a mayo. Mientras que algunos tipos de malezas como la artemisia que proliferan en rocas, muros y otras zonas sin cultivar, florecen de julio a diciembre.
¿Te encantan las mascotas?
Tal vez si tienes alguna en casa, pueda ser la causante de tu molesta rinitis alérgica. Los animales, también forman parte de este grupo de causantes de rinitis alérgica. La caspa, saliva u orina de gatos, perros, conejillos de india y caballos generan una respuesta exagerada en los organismos de las personas que sufren de esta afección.
Tal vez te preguntes: ¿Cómo reconocerla?
La rinitis alérgica se manifiesta con síntomas muy parecidos a los del resfriado:
- Congestión, goteo y picazón nasal
- Lagrimeo y enrojecimiento ocular
- Estornudos constantes
- Resequedad en la garganta y tos
- Pérdida del olfato
- Piel inflamada y azulada debajo de los párpados
- Fatiga, cansancio, mal dormir
Los únicos síntomas que no deberían presentar las personas que sufren de rinitis alérgica son malestar general, dolores musculares y fiebre. Si tienes estos síntomas debes acudir a tu médico.
Ojo con la rinitis alérgica en los más pequeños
En niños en etapa escolar es muy común la confusión entre resfríos y rinitis alérgica debido a que entre los 2 a 5 años el sistema inmunológico infantil está combatiendo con los virus y bacterias. Generalmente están pululando en sus aulas de clase. Por ello es muy importante conocer sus antecedentes hereditarios y acudir al médico lo más pronto posible ante cualquier síntoma alarmante.
Es importante destacar que la falta de atención de la rinitis alérgica puede desencadenar complicaciones como hipertrofia de adenoides y/o amígdalas. Estos son tejidos ubicados entre la garganta y el paladar y su crecimiento anormal (hipertrofia) va marcado por la presencia de resfríos. En este caso, de la rinitis alérgica sin tratar por períodos muy largos de tiempo.
¿Cómo sé que tengo?
Una vez que nos encontramos en presencia de los síntomas de la rinitis alérgica, es importante acudir a un médico especialista. Así podremos descartar complicaciones y confirmar que estamos ante la presencia de esta enfermedad.
Será el otorrinolaringólo y/o alergólogo los que evaluen la posibilidad de rinitis alérgica. Según sea el caso, dependiendo del resultado del interrogatorio al paciente. Presencia de rinorrea, coloración de esta, estornudos, frecuencias de estos, congestión nasal, en qué temporadas se tienen mayores síntomas, etcétera.
Una vez realizado esta primera investigación el especialista puede determinar el tipo de rinitis alérgica entre intermitente-persistente y leve-moderada-grave.
Otros tipos de rinitis
La rinitis no alérgica va marcada por la ausencia de estornudos y moqueo constantes pero con mucha obstrucción nasal. Además descarga de prurito en la parte posterior de la garganta.
Al contrario de la rinitis alérgica, la rinitis no alérgica se manifiesta en cualquier época del año. Está marcada por estímulos como olores y cambios de temperatura.
La rinitis vasomotora se manifiesta cuando presenciamos un cambio de temperatura brusco. Lo más frecuente es que se manifieste en épocas de mucho calor o mucho frío como el verano o invierno.
La rinitis gustatoria se presenta cuando el individuo ingiere comidas muy picantes o calientes. La situación es la misma, presencia de goteo nasal automático.
La rinitis medicamentosa se da por el uso exagerado de descongestionantes nasales. También es llamada rinitis de rebote.
¿Que tratamiento es efectivo?
Generalmente para combatir los síntomas alérgicos se usan los antihistamínicos que son casi siempre de venta libre. En todo caso, siempre es importante la opinión de un especialista. Sin embargo, la mejor opción es evitar al máximo tener contacto con los agentes que provocan todos los síntomas. Igualmente te dejaos una lista con una gran variedad farmacológica. Será tu especialista el que te recetará la más adecuada para mejorar la rinitis alérgica:
- Antihistamínicos: como te comentábamos los antihistamínicos son los medicamentos por excelencia para combatir la rinitis alérgica. La presentación más común es en pastillas o grageas, aunque también se pueden conseguir en aerosol y gotas oculares. Estos medicamentos bien administrados no causan reacciones adversas en el organismo, ni efectos rebotes ni secundarios.
- Descongestionantes. Son usados para disminuir el flujo sanguíneo en la zona nasal. Ésta ocasiona que los tejidos se inflamen y no pueda circular el aire correctamente hacia los pulmones. Dentro de los descongestionantes más comunes para la rinitis alérgica podemos encontrar la pseudoefedrina, la nafazolina, la fenilefrina y la oximetazolina. Se pueden conseguir tanto en gotas o aerosoles nasales como en pastillas.
Es importante que si vas a tomar descongestionantes sea bajo supervisión médica. Estos pueden ocasionar efectos secundarios como arritmias, taquicardias, hipertensión y dolor de cabeza. Además, si lo usamos frecuentemente podemos empeorar o lo que es comúnmente llamado como congestión nasal de rebote.
- Corticoides nasales: son los más fuertes y efectivos contra la congestión nasal. Se encargan de prevenir y tratar la inflamación y secreción ocasionada por la rinitis alérgica. Los más utilizados son la mometasona y budesónida y deben estar prescritos por un especialista para poder ser adquiridos.
¿Sabes cuál es el truco para combatir la rinitis alérgica? ¡Vamos a prevenirla!
Te vamos a dar una serie de consejos para sentirte mejor cuando tienes rinitis alérgica. Con éstos podrás evitar los síntomas que te causan molestias.
- Las mañanas son la hora del día por excelencia para que el ambiente esté repleto de polen; por ello evita realizar actividades al aire libre a estas horas.
- Mantener las ventanas de la casa cerrada y ventilar solo a primera hora del día o por la noche.
- Tratar de viajar en autos cerrados y evitar el uso de bicicletas y motos.
- Usar protección solar, ropa cubierta y además lentes de sol
- Mantener limpios los filtros de humidificadores y aires acondicionados
- Evitar la acumulación de polvo en diversos objetos que son idóneos para la proliferación de ácaros como cortinas y peluches. Sacudir y ventilar periódicamente.
- Mantener a las mascotas aseadas, con el cabello bien cortado y además aspirar las alfombras con regularidad.
Increíble: ¿te imaginabas que todo esto podía ser ocasionado por la rinitis alérgica?
La rinitis alérgica puede ser un factor desencadenante de una mala calidad de vida; puede afectar tu desempeño laboral, escolar… Inclusive amoroso ya que debido a la permanente congestión nasal el cuerpo debe hacer un sobre esfuerzo por mantener el sistema respiratorio funcionando correctamente.
Todo esto hace que se vuelva cuesta arriba si no se consumen los medicamentos adecuados. Es por ello, que es muy importante detectar los síntomas a tiempo y atacarlos no sin antes ir previamente a un especialista.
La rinitis alérgica es una patología que se da de manera muy frecuente en niños desde edad escolar hasta la adolescencia y edad adulta. Es importante destacar que los síntomas de la rinitis alérgica son muy parecidos a los de otras enfermedades; por ello es especialmente importante evaluarlos y tomar acciones antes de que pueda complicarse con otra afección más grave.Evitar malos diagnósticos, auto-medicación y tratamientos ineficaces.
Esperamos te haya sido de utilidad este artículo y no olvides compartirlo con tus amigos.
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